Observo constantemente en las calles, centros comerciales, restaurantes, salas de espera y hogares a más y más niños menores de 1 año con tableta o celular en sus manos. ¿Por qué los papás lo permiten? ¿Pensarán que los están preparando para el mundo digital? ¿Quieren descansar de ellos?
Cualquiera que sea la razón hay que tener cuidado con las consecuencias negativas para su personalidad y cerebro. El año pasado, Ippei Takahashi, experto en el desarrollo temprano de los niños, publicó un estudio titulado Screen Time at Age 1 Year and Communication and Problem Solving Development Delay at 2 and 4 Years (Tiempo de pantalla en niños de 1 año y su retraso en el desarrollo en la comunicación y solución de problemas a los 2 y 4 años) en el que expresa su preocupación por las consecuencias negativas del uso de la tecnología en niños menores de 1 año.
Una conclusión importante es que los niños que están expuestos a pantallas antes del año presentan serios retrasos en su desarrollo evolutivo y social. Por ejemplo:
1. Retraso en su comunicación y problemas de lenguaje. Los niños poseen poco vocabulario y alteraciones en su lenguaje oral. Tardan más tiempo en hablar y tienen más trastornos en su lenguaje articulatorio y vocabulario.
2. Pobre dependencia de actividades de la vida diaria. Son dependientes para comer, ir al baño o vestirse. Muestran pocas capacidades autónomas de la vida cotidiana y necesitan siempre ayuda para realizarlas.
3. Pocas habilidades de interacción social y siempre buscan ser el centro del universo. Poca tolerancia a frustraciones y sus reacciones serán impulsivas al no satisfacer sus necesidades y caprichos.
4. Torpe en sus capacidades motoras gruesas y finas. Su desarrollo psicomotor será lento y presentará problemas en su coordinación ojo-mano, constancia de formas, lateralidad, ubicación y relaciones espaciales que son fundamentales para el aprendizaje de la lectura y escritura.
5. Alto riesgo al presentar problemas de atención. Una de las consecuencias más serias en la exposición de pantallas su deterioro en su capacidad cognitiva de atención, Nos enfrentamos a una generación dispersa que no es capaz de mantener su esfuerzo para recibir los estímulos para asimilarlos y procesarlos.
6. Problemas de impulsividad y trastornos de conducta. Conflictos de autocontrol en sus respuestas, especialmente en situaciones adversas: gritarán, golpearán, insultarán o aventarán todo lo que esté a su alcance cuando se les contradiga y no obtengan lo que desean.
7. Probabilidad de problemas de desarrollo como espectro autista. No existe nada definitivo sobre la causa del autismo. Sin embargo, la exposición temprana de tecnología puede detonar este problema.
Existe una gran evidencia de que los padres no deben entregar celulares o tabletas a sus hijos. Hay que evitar la formación de dependientes digitales con serios problemas de inmadurez cognitiva, motora y emocional en edades muy tempranas.
Tenga en cuenta estas señales antes de darle a su hijo pequeño un dispositivo. No los está beneficiando, al contrario.